Entrevista hecha por Rebeca Fernéndez para El Universal
La novela protagonizada por Radio Caracas Televisión (RCTV) y el Gobierno en el 2007 puede reeditarse con las emisoras radiales, si se aplican las propuestas hechas hace dos semanas por el ministro de Obras Públicas y Vivienda (Mopvi), Diosdado Cabello, para “democratizar” el espectro radioeléctrico, a juicio del director de la revista SIC, Arturo Peraza:
-¿Hay un latifundio mediático en el país?
-No comparto esa idea, ese tipo de medidas que se pretenden tomar no se explican por la vía de una democratización del espectro radioeléctrico, porque este sigue siendo amplio y es manejado por una gran cantidad de personas. Lo que uno desearía es que haya mayores facilidades para que más personas puedan acceder a ese espacio y allí creo que el tema de la producción nacional independiente es algo positivo, pues puede servir de mecanismo de ampliación todavía mayor.
-Pero el ministro Diosdado Cabello dice que cerrar 240 emisoras y transferir sus concesiones a otras manos contribuiría a la democratización de la radio…
-Tengo la impresión de que se trata de un mecanismo de restricción de acceso a la información hacia los venezolanos. La radio es un medio muy poderoso, tiene fuerte acceso a la población, es un mecanismo de información inmediata y de entretenimiento. Además, acuérdate que la radio es bien plural: tienes emisoras informativas, de entretenimiento, culturales, dedicadas a temas infantiles o a la educación, como Fe y Alegría; hay un conjunto amplio en el espectro radioeléctrico, así que, lamentablemente, cuando dicen que cerrarán 240 radios no descubro ningún elemento de democratización, sino de cercenamiento de la pluralidad que es propia de ese ámbito.
-La Cámara de Radio denunciaba desde hace tiempo que existían varias emisoras ilegales, pero es ahora cuando el Gobierno anuncia que tomará medidas, ¿por qué?
-Las decisiones parecen estar mucho más enmarcadas en el plano ideológico que en el normativo. Honestamente, creo que el punto no está en si pueden existir o no radios irregulares, porque, si existían, lo ideal hubiera sido que tuvieran la posibilidad de acceder al ente estatal y solicitar su regulación.
-¿Qué es lo que busca el Estado entonces?
-Me llama la atención por qué sí puede haber circuitos para el tema deportivo y no para noticias. Me pregunto entonces de qué se trata esta diferencia, porqué si la idea es que no hay circuitos entonces eso vale para todos los efectos. Si es deportivo tiene elementos positivos, ¡ah!, pero el circuito noticioso no. Mepregunto por qué y no hay respuesta oficial, no hay criterio y es allí donde uno descubre que es más una intención ideológica que una verdadera intención de democratización. Lo que se quiere tocar es el espacio informativo.
-El Presidente Hugo Chávez propuso sustituir las 240 estaciones por una radio popular, ¿cree que con esto se corre el riesgo de recibir un único mensaje?
-Las radios comunitarias son bien diversas, no existe una sola línea de pensamiento en las radios comunitarias. La pretensión de asegurar que al ser cercanas al proceso político del presidente de la República entonces piensan exactamente lo mismo es no saber acercarse al fenómeno que significa la radio comunitaria.
-Aunque algunos comunicólogos han hablado en contra de la propuesta de Cabello, todavía no se ha visto que la población reaccione en contra de la medida…
-El tema ha empezado a generar discusión y la radio se ha encargado de informar en torno al problema. Habrá que esperar a ver cual es el efecto que tiene ese mecanismo de información que están utilizando las emisoras. Ahora, mi impresión es que, hasta ahora ,no hay una opinión de la población sobre el tema.
-¿Cree que el silencio se debe a desinformación o a falta de interés?
-Hay que ver cual es la reacción de la gente si se toma la medida, porque es distinto que estén amenazando que va a haber una medida, a que realmente se ejecute. Creo que si el Gobierno no ha tomado la decisión es porque hay factores que le están indicando que podría haber alguna reacción. Quisiera señalarle en paralelo lo que ocurrió cuando se intervino la Policía de Miranda en Curiepe. La inseguridad es un problema número uno para la gente y en ese caso poco importó si se era chavista o no. Allí hubo reacción fuerte e inmediata. La gente vio que le tocaban una salida al problema de inseguridad y que los estaban dejando abandonados por lo que las personas reaccionaron y con mucha fuerza. En cambio, hay otras cuestiones que no le están angustiando en este momento y tengo la percepción que la radio no es un tema que preocupe.
-¿Y si el gobierno efectivamente decide tocar a las emisoras?
-Habrá que esperar, porque una cosa es que se esté hablando del problema de los circuitos, que es algo que la gente no entiende porque es un poquito complejo, y otra que, efectivamente, un día amanezca, prendan la radio y no eschuchen su programa. Allí puede haber un cambio de señal muy fuerte. Lo que si le diría es que uno tiene que recordar que si hubo un cable que el Gobierno pisó fue el tema de RCTV. Todavía hoy la gente sigue sin encender el canal 2 y esa es una señal clara. Llevamos dos años desde que se cerrara RCTV como señal abierta y todavía el Gobierno no logra que su televisora se monte y allí el problema no está en que se pase éste o ese programa, el punto es lo inadmisible del hecho para la población. El Ejecutivo puede contar lo que quiera, pero lo fáctico es que no tienen más allá de un pequeño porcentaje del share. Nunca llegaron a democratizar el espectro televisivo que fue la promesa que hicieron, fue un acto contra democrático
-En esa ocasión no hubo una reacción inicial…
-Hubo reacciones de la clase media pero después y el pase de factura llegó hasta las elecciones del 2007. Una de las causas de la derrota de Hugo Chávez ese año fue el cierre de RCTV, y eso no lo ha recuperado tan fácilmente, ya que la victoria del 2008 y del 2009 fueron muy limitadas frente a la que obtuvo en el 2006. Ojo que no se le vaya a repetir de nuevo la historia de RCTV, que es el rechazo popular traducido en la merma en la votación, pues no atender las demandas populares sale costoso o a punta de tambores o a punta de abstención.
-¿Qué recomienda al Ejecutivo entonces?
-Hay que seguir invitando al Gobierno y a las entidades públicas a dialogar y buscar solucionas para los ciudadanos, que no se presenten enfrentamientos como el que ocurrió en Curiepe, pues en definitiva desmejoran las condiciones de vida de la población. Hay que señalar que la responsabilidad del Gobierno es muy importante en la dirección de respetar a las instancias estadales y municipales en sus funciones; a la vez que es necesario que esas instancias entiendan que requieren coordinar con el Estado. Para todo esto se necesita de la palabra diálogo, algo que ha desaparecido del vocabulario de nuestros actores políticos más importantes.