Scroll Top
Edificio Centro Valores, local 2, Esquina de la Luneta, Caracas, Venezuela.

Ka Ubanoko: actuar a fuerza de identidad

8.1
Foto: Yolanda Simone Mene

La organización comunitaria como oportunidad

Por Marielys Briceño Altuve*

SUMARIO

Este artículo es una reflexión sobre la organización comunitaria en la ocupación espontánea de Ka Ubanoko, que en warao significa “lugar para dormir”. Ka Ubanoko, conformada por un grupo de venezolanos que tuvieron que vivir en un mismo lugar, aprender unos de otros y resistir en un espacio público abandonado por el Estado dentro de la ciudad de Boa Vista, Estado de Roraima, un puente que conecta la Amazonía venezolana con la Amazonía brasilera… Una experiencia de vida que enriquece aún más la diversidad

La población indígena y no indígena ingresa a través de Boa Vista–RR, ubicada en la región norte de Brasil, en la frontera con el estado Bolívar al sur de Venezuela, desde 2014 y con mayor intensidad desde el año 2018, configurando un escenario de intensa movilidad humana en la Amazonía continental. La complejidad del país, la situación de emergencia de los últimos años, afectó también la población indígena proveniente del Nordeste (Delta del Orinoco) y sur del país (estado Bolívar). Tres representaciones de estos pueblos, enepá, kariña y warao, convivieron con no indígenas en la ocupación espontánea de Ka Ubanoko, localizada en la ciudad de Boa Vista, Barrio Joque Clube en las antiguas y abandonadas instalaciones del Clube de Servidores.

Para mediados de septiembre habían más de 850 familias viviendo en Ka Ubanoko. El predio se comienza a conformar como ocupación a partir del 22 de febrero del año 2019. Los primeros en unirse fueron un grupo de familias no indígenas; a los pocos días llegaron eñepás con familias cuyas lenguas y rasgos físicos eran notoriamente diferentes; pocos días después llegaron waraos y de último kariñas. En los próximos días siguieron llegando indígenas y no indígenas:

El principio fue un poco difícil de adaptar, tantos indígenas nunca se han unido, pero ahora valoran el aprendizaje de los demás; en la comunidad, a pesar de sus diferencias, hemos podido reconciliarnos y organizarnos como comunidad, con la esperanza de continuar durante mucho tiempo1.

Según el “Perfil migratorio venezolano y demandas de políticas públicas en Boa Vista”, investigación desarrollada por la Fundación Fé e Alegría do Roraima con la Univerisidade Federal do Roraima (UFRR), existían roles de liderazgos para la organización y autogestión que potenciaban las oportunidades de satisfacer sus necesidades más básicas. En el caso de los pueblos indígenas, se incluyen actividades específicas de sus culturas que no podían realizar dentro de los refugios convencionales. Los debates durante la investigación permitieron conocer la importancia de la auto-organización y la autogestión del espacio en la reafirmación de la identidad étnica de estos grupos2.

Organización interna

Esta contaba con dos tipos de coordinaciones generales: una indígena y una no indígena. La ancestral indígena (por familias a cargo de un aidamo) y la comunal indígena siguiendo el modelo de organización comunal venezolana (comité de educación, comité de educación cultura, comité de alimentación, comité de higiene y salud, comité de alimentación deportes, comisión de seguridad). El grupo no indígena contaba con una coordinación general y el mismo modelo de organización comunal venezolana. Los indígenas eran acompañados por el Consejo de ancianos. En la toma de decisiones de la organización indígena se utilizaba el sistema ancestral de grupos de familias vinculados a un aidamo, consulta y consenso al que se vinculan consejos de personas mayores. En la organización no indígena utilizaban las figuras de los comités con ciertos niveles de autonomía. En el grupo no indígena la toma de decisiones se realizaba con participación de miembros de los diferentes comités. Usan consulta y consenso. Los demás casos trascendentales exigían asambleas generales.

Dentro de las actividades de organización y co-gestión, desarrollaron proyectos con el apoyo de otras organizaciones (World Vision, SJMR, Fundação Fé e Alegria, Unicef) en el área de educación, recepción y distribución de alimentos perecederos y no perecederos, recepción y preparación de alimentos de refuerzo escolar, ayudas de costos de voluntarios de seguridad, organización para la limpieza.

A responsabilidade coletiva é um exercício constante na ocupação que comprova que os deslocamentos não retiram do grupo a sua identidade e a sua capacidade auto-organizativa. A seu modo o grupo vai criando regras de convivência, horários, uso coletivo do espaço, distribuição de tarefas relacionadas ao espaço habitado, manifestações culturais e religiosas, dentre outras.

Actividades de formación junto al Centro Gumilla

En el perfil migratorio y demandas de políticas públicas consta que:

Los relatos de observaciones participantes realizados en diversas acciones formativas, especialmente los talleres promovidos por la Fundación Fé e Alegria, revelan una importante participación de los migrantes y la búsqueda de información y espacios para reflejar su situación de migrantes y buscar salidas junto con instituciones de apoyo.4

Los líderes participaron del Programa de Capacitación de Liderazgo Ka Ubanoko dentro del Proyecto panamazónico desarrollado por la Fundación Fé e Alegria y el grupo GEIFRON de la UFRR en el 2019; formación que continuó en el año 2020 con la participación de la Fundación Centro Gumilla de Venezuela a través del Programa de Capacitación para la Organización Comunitaria (Programa FOCO), brindando herramientas para ejercer el liderazgo en las dimensiones personal, organizacional, comunitaria y sociopolítica.

Construcción y reafirmación de identidades

Entre septiembre de 2020 y enero de 2021, se reafirmó la identidad indígena advertida al inicio de este proceso migratorio en el año 2014, como se señaló en “Aspectos legales de la migración indígena de Venezuela a Brasil”5. Los indígenas hallaron que, como pueblos originarios, podían tener un mecanismo para protegerse y sobrevivir; en consecuencia, reafirmaron aún más su etnicidad, lo cual se nota en el orgullo con el que los líderes comúnmente se identifican. También en el transcurso de los meses de convivencia se fortaleció la venezolanidad expresada por ambos grupos, actuando en conjunto como “Ka Ubanoko, una comunidad organizada de migrantes venezolanos” donde quedaban incluidos todos indígenas y no indígenas.

Hasta el contexto actual, los resultados de la reafirmación de la identidad indígena como mecanismo de resistencia contra la fuerza del Estado representada por el grupo de trabajo de Operación Acolhida, llegó incluso a proteger a los no indígenas en el sentido de que la decisión de diferir el acto de desalojo se aplicó también a estos últimos.

Hoy Ka Ubanoko está en su etapa final de desocupación. Finalmente, las presiones sobre ellos vulneraron sus cimientos de unidad indígena y no indígena, los conflictos resurgieron, la presión por la disminución de ayudas de alimentación y otros aspectos forzaron la salida de Ka Ubanoko. Acnur, y otras organizaciones de acción local, apoyaron con recursos para pagar el alquiler de algunas familias criollas que salieron en una primera ola. Los indígenas decidieron ir a los abrigos diferenciados en grupos grandes y a finales de este mes de enero serán derrumbadas el resto de las casas improvisadas. A pesar de estas decisiones, continúan manifestando su decisión de resistir y continuar en la lucha por sus demandas de educación intercultural y tierras.

*Asistente de Proyectos de la Fundación Fé e Alegria do Brasil RR. Técnico responsable de ejecución del proyecto panamazónico “Cuidado de la Casa Común” de las Companias Jesuítas para América Latina.

NOTAS:

  1. MARTINES, Nancy. Audio Nro. 1 del 3 de octubre de 2020. Miembro del primer grupo que se incorporó a Ka Ubanoko.
  2. OLIVEIRA, M.; SARMENTO, G.; VALERIO, J. Capítulo V. (2020): Perfil Migratório venezuelano e demandas por políticas públicas em Boa Vista. Coletânea interfaces da mobilidade humana na fronteira amazônica. Vol. 1. Editorial UFRR. Campus Pacaraima. Boa Vista, RR.
  3. Ídem: “La responsabilidad colectiva es un ejercicio constante en la ocupación que comprueba que los desplazamientos no retiran del grupo su identidad y su capacidad auto-organizativa. Según su modo el grupo va creando reglas de convivencia, horarios, uso colectivo del espacio, distribución de tareas relacionadas al espacio habitado, manifestaciones culturales y religiosas entre otras” (Traducido al español por la autora).
  4. Ídem.
  5. Cualquiera que sea el modo de desplazamiento, tiene diferentes implicaciones, incluida la naturaleza sociocultural, especialmente en el caso de los desplazamientos indígenas donde es posible que el elemento identitario tenga un papel cohesivo importante para que los grupos se adapten sin perder sus vínculos con elementos, con la naturaleza, familiares y miembros de sus comunidades de origen (YAMADA, et al. 2018).

Entradas relacionadas

Nuestros Grupos