Por Alquilino José Mata
“Todos mis conciertos de este año han llenando el teatro”, exclama entusiastamente Andy Durán, al referirse a las cinco presentaciones que ha llevado a cabo a lo largo de 2018 en el Centro Cultural BOD, espectáculos temáticos dedicados, dos a la Billo’s Caracas Boys, dos a Tito Rodríguez y Tito Puente y uno a la Fania, realizado el pasado 14 de octubre, que dada la repercusión que tuvo repetirá este domingo y para el cual ha vendido prácticamente toda la boletería, pues cuando escribimos esta nota solo faltaban 46 tickets por vender.
Lo que pareciera a simple vista como el descubrimiento de la fórmula del éxito por parte del veterano maestro, no es más que el producto de su afán por abarcar y comprender concienzudamente diversos estilos musicales. “Lo vine a entender luego de años de trabajo. Soy fundamentalmente un director y cada cosa en la música tiene su concepto: la de Billos es big band, pero en otro estilo, como también lo es la de Tito Rodríguez y Tito Puente, entonces uno puede desarrollar conciertos temáticos a partir de allí. Cada uno de esos conceptos tiene su atractivo desde el punto de vista artístico y musical. Me gusta la salsa, el jazz, la balada, la música venezolana. Y uno tiene la mente abierta para comprenderlos a todos.
-¿Pero tiene algún estilo que sea de su preferencia?
-De mis 22 discos, más de la mitad son de latin jazz, que es el estilo que más me gusta.
Cuando le preguntamos si hará cambios de repertorio en la repetición del concierto dedicado a Fania, sostiene que no, ciñéndose al mismo esquema que aplica en el resto de los tributos musicales ya aludidos.
-Se va a repetir la misma receta, como en una obra de teatro, solo los comentarios en torno a cada tema podrán variar, pero el repertorio será el mismo: Anacaona, Mi debilidad, Mi gente, El ratón, Quítate tú, que es lo que la gente quiere oír. Es tanto como hacer el soundtrack de las películas Nuestra cosa latina y Salsa, más otros números agregados que son la esencia de Fania.
-¿Será su último concierto temático por este año?
-No. Mi próximo concierto temático será Billo en Navidad, que presentaré los días 2 y 16 de diciembre en el Teatro Trasnocho. Además de los temas decembrinos de esa orquesta, tocaré los éxitos “billeros” que siempre me piden, como el Mosaico 7, Ariel y muchos otros. Me emociona ver cómo la gente se abraza, canta, baila o llora en mis conciertos. En momentos como los que vivimos es más conmovedor, porque la gente siente que podemos estar en peligro de perder ese legado. Por eso pienso que hay que hacer permanentemente estos espectáculos, para conservar esas tradiciones que, por supuesto, no nos van a quitar.
-¿Novedades para 2019?
-Vengo con una orquesta de charanga. Tocaremos danzones, cha cha chá, panchanga, guajiras… será como Fajardo y sus Estrellas, la Aragón, la Orquesta Broadway y otras por el estilo. La charanga es un formato con flautas, violines, violas y cellos, sin trompetas ni trombones. Es un sonido más delicado, casi siempre el repertorio es cantado a coro, al unísono, como en El bodeguero. También preparo otro concierto temático con la música de Colombia, donde interpretaremos vallenatos, cumbias y porros. Y otro, que ya tengo listo, con los grandes clásicos del jazz.
Otro de sus proyectos para el año próximo no deja de ser ambicioso y atractivo: una obra de teatro, pero con ingredientes muy particulares.
-Se llama Esta es mi orquesta y la puesta en escena es con la banda ensayando, para que el público pueda ver cómo transcurre esta sesión y en qué consiste, cómo se tocan y bailan las canciones. El corolario es una descarga para ver cómo se interpreta de acuerdo al estilo Billo, Pérez Prado, Tito Puente, etc. Dura dos horas y es de una gran belleza didáctica, además de muy entretenida. Veremos los músicos con sus ocurrencias, pues van a ser ellos los protagonistas. Será como un reality show.
Fuente: Diario el Universal
