Por Francisco J Contreras M
Tres referencias ya citadas por nosotros permiten identificar las metas que podrían ser fijadas para el rescate de los recursos del país en el exterior:
Emilio J. Medina-Smith: La fuga de capitales en Venezuela, 1950-1999
La fuga de capitales en América Latina
Fuga de capitales en países menos desarrollados
El populismo emergente en el mundo (sea de derecha o de izquierda) posee su fuerza y alicientes más poderosos en la disolución de la autonomía, independencia y legitimidad de los poderes públicos, es el mecanismo anti frágil que sirve de velo para ocultar un sistema de extracción de rentas mediante el ejercicio de poder discrecional, de manejo de información privilegiada y de creación de incentivos perversos.
La otra pantalla que sirve a la extracción de rentas es la emisión irresponsable de dinero para la distracción ubicua de la malversación de fondos endosando sobre los demás las culpas de su responsabilidad originaria de la hiperinflación y de la depresión económica que asola a los países donde se instaura ese mal.
La gran disrupción tecnológica tiene también importancia para el futuro de la democracia mundial, los recientes casos de corrupción develados en Argentina y Brasil constituyen los signos de que es posible identificar la trazabilidad del desvío de los recursos de una nación hacia destinos diferentes a los del bienestar de la gente.
En Venezuela esos fondos pueden superar los 600 MM de $ USD y el total en América latina, de los 13 países con mayor fuga de capitales, alcanza 2.015 MM $ USD. El futuro es esplendoroso, se puede fijar una meta modesta de rescate de 20 % de esos fondos, en su mayoría fruto de ilícitos, distribuyendo 10 % para enfrentar la crisis económica en cada país y el restante 10 % para la creación de un organismo internacional para la lucha contra la corrupción. Se comparten tablas con la composición de la fuga de capitales en América Latina.
