Guido Zuleta
La conmemoración en Venezuela, y otros países del Día de la Madre, (11.05.2014) es una oportunidad para las comunidades de valorar el significado creador de la maternidad y la dimensión femenina en la fe, la cual ha pretendido imaginar a un dios varonil. Y ¿Ese misterio que el cristianismo y otras religiones llama Dios, no cabe sentirlo como Padre y Madre. Como decía el Papa Juan Pablo I: Dios es Padre, pero, sobre todo, es Madre?
Señala el teólogo de la liberación Juan José Tamayo “En el imaginario patriarcal religioso, influido por los clérigos, imanes, rabinos, lamas, gurús, pastores y maestros espirituales, las mujeres son consideradas tentadoras, ligeras de conducta, amorales, etc. Esa imagen se ha elaborado a partir de determinados textos de algunos libros sagrados escritos en lenguaje patriarcal, y leídos con ojos fundamentalistas… Sólo los varones pueden ser sacerdotes en la Iglesia Católica, imanes en el islam y rabinos en el judaísmo ortodoxo, sin que haya texto sagrado alguno que excluya a las mujeres”. De allí “ha surgido una nueva manera de vivir y de pensar la fe religiosa desde la propia subjetividad de las mujeres en las diferentes religiones, sobre todo cultivada por mujeres: la teología feminista.(J.J. Tamayo. Reflexiones sobre las mujeres en las religiones y la Teología Feminista. San Salvador. 28.06.2013)
Por su parte, Leonardo Boff, en su ensayo interdisciplinar sobre lo femenino y sus formas religiosas, valorando la dimensión humana y simbólica de María, Madre de Jesús, afirma:
“El significado de María se extiende hasta alcanzar el misterio del ser humano, masculino y femenino, y el misterio religioso de la creación…las letanías a la Virgen encierren ciertas cualidades atribuidas a María que nuestra cultura suele adjudicar a uno solo los dos sexos. De esta forma María es la madre purísima, la madre amable, la rosa mística, la estrella de la mañana, cualidades que son eminentemente (pero no de forma exclusiva) propias de lo femenino, mientras que al mismo tiempo se celebra a la virgen poderosa, a la torre de David, al espejo de la justicia, atribuciones que son más bien (aunque no exclusivamente) masculinas”. (LBoff. El Rostro Materno de Dios. Ed Paulinas. Madrid.1979).
Así, la monja médica y teóloga Teresa Forcades i Vila diferencia: Una mujer que defienda la sumisión de las esposas a sus maridos, o de sus maridos a sus esposas, tiene una perspectiva femenina, pero no feminista:
“La teología feminista es una modalidad de teología crítica o de la liberación. El camino de la teóloga o del teólogo feminista es, por tanto, necesariamente un camino de lucha y de reivindicación, pero esto no significa que tenga que ser sólo un camino de lucha y de reivindicación. No lo es. Es al mismo tiempo, y desde el núcleo mismo de su compromiso, un camino de gratuidad de don, de sorpresas y regalos inesperados, de descubrimientos que ensanchan cada vez más el horizonte inicial”.(T. Forcades. La Teología Feminista en la Historia. Ed Fragmenta.2011).
Desde esta perspectiva se puede decir, con agradecimiento, a las madres vivas, a las que perviven en los corazones y a quienes hacen sus veces: Feliz Día de la Madre.
Programa: “LLEGÓ LA HORA” de FUNDALATIN Nº 661. Sábado 10/05/2014 transmitido por Radio Nacional de Venezuela Canal Informativo