La Red de Apoyo por la Justicia y la Paz, organización venezolana defensora de derechos humanos, hace del conocimiento de la comunidad nacional e internacional su absoluto repudio y la más enérgica condena al golpe de estado ocurrido el día de hoy en la República de Honduras, contra el gobierno legítimo del Presidente Manuel Zelaya Rosales.
El secuestro del Presidente Constitucional y su expulsión del país; la acción militar de las fuerzas armadas hondureñas contra el gobierno legítimamente constituido y su acción represiva contra el pueblo hondureño; la restricción grotesca de la información al pueblo hondureño por parte de los medios de comunicación privados, así como la toma y cierre del canal del Estado; la agresión a representantes diplomáticos de países del ALBA, entre otras deplorables acciones ocurridas el día de hoy hacen urgente la acción de la comunidad internacional, de los pueblos latinoamericanos y de sus gobiernos, para aplicar los principios de la Carta Democrática Interamericana, desconocer a los actores golpistas que han tomado el poder y exigir la restitución del orden constitucional.
Igualmente, en la medida que detentan el poder de facto, exigimos a los actores que mantienen el control del poder público en Honduras garantizar los derechos humanos de toda la población, especialmente de los sectores de la población que apoyan al presidente legítimo Manuel Zelaya, cumpliendo a cabalidad los acuerdos y tratados internacionales de derechos humanos que el Estado hondureño se ha comprometido a cumplir.
Exhortamos a los gobiernos del mundo a no reconocer ningún gobierno de facto que se instale en Honduras, exigir la restitución del gobierno del Presidente Zelaya y que se proceda legalmente contra los autores intelectuales y materiales de este atentado contra la democracia hondureña e indirectamente contra la democracia en el continente.
De igual modo solicitamos a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos pronunciarse sobre este caso y adoptar todas las medidas pertinentes para garantizar los derechos humanos de las personas que pueden resultar objeto de persecución por parte de los golpistas.
Nos unimos al clamor de los movimientos sociales del continente y el mundo para exigir que se respete la voluntad del pueblo hondureño y se recuperen las condiciones democráticas en ese país.
Caracas, 28 de junio de 2009