El nombre de Hermanas del Ángel de la Guarda, con el que somos reconocidas esta familia de religiosas, es símbolo y programa su modo de ser y ha de reflejarse en las tareas apostólicas. Como los Ángeles, a los que la escritura muestra con una misión de salvación, han de estar prontas para cumplir la voluntad de Dios, siempre en actitud de servicio, disponibles para el anuncio del Reino
Isaic Calderón
La Madre San Pascual y el Padre Luis Ormières fueron los fundares de esta orden religiosa, cuyo carisma es “formar verdaderos discípulos de Jesucristo” y Venezuela fue una puerta importante para llegar al resto de Latinoamérica.
Actualmente hay alrededor de 16 religiosas de esta orden, distribuidas en varios estados del país. Las Hermanas del Ángel de la Guarda se enfocan principalmente en el área educativa, llevando la educación con un toque cristiano a las comunidades más pobres del país, como Caramacate, del estado Apure.
En el ámbito social y de salud también aportan su granito. La hermana Glaudis Blanco pertenece a esta orden, quien vive en la parroquia Virgen del Valle del estado Yaracuy, dice que aun con la crisis que vive el país “las hermanas hacen lo que pueden para ayudar a los más vulnerables que son los niños y los ancianos”
En la parroquia Virgen del Valle, las hermanas se unieron a la misión de Cáritas y han realizado ollas comunitarias con la ayuda de los propios pobladores, pues afirma la Hna. Glaudis “a pesar de todo lo que vivimos actualmente, hay muchas personas que desean colaborar y lo hacen. Ese es parte del mensaje que nosotros como pastores del Señor queremos enviar al país”.
Pero la ayuda internacional también ha sido necesaria y ante el llamado de las Hermanas del Ángel de la Guarda de Venezuela, la orden de España envió medicinas y medicamentos para los niños censados por las hermanas en la comunidad de la Virgen del Valle.
En noviembre, las hermanas volvieron a realizar un censo con los niños y ancianos que más dificultades presentan y que no tienen para un medicamento o simplemente no lo consiguen en el país. En esta ocasión la petición fue hecha y respondida por las Hermanas del Ángel de la Guarda de México, pero al llegar la medicina al puerto de La Guaira las autoridades decomisaron los medicamentos.
La Hna. Gluadis viajó a Caracas para solucionar el inconveniente, pues tenía en su poder las facturas y recipes. Pero las autoridades solo le dijeron “los medicamentos están retenidos definitivamente”.
“Para nosotras fue un duro golpe”, dice la Hna. con un nudo en la garganta, “porque esos medicamentos eran muy importantes para las personas de bajos recursos”. Uno de los niños que requería el preciado medicamento fue hospitalizado por no atender su patología debidamente, aunque hace unos días, afirma la Hna. Glaudis, fue dado de alta.
Entre los medicamentos que fueron decomisados por las autoridades venezolanas están: anticonvulsivos, ampollas complejo B, pastillas para la tensión y tratamiento para el parkinson.
Aunque fue un “duro golpe”, las Hermanas mantuvieron y mantienen la esperanza para su pueblo, no se permiten desfallecer y siguen trabajando para ayudar al más necesitado con lo material, pero sobre todo con lo espiritual. “Son oportunidades de Dios para sacar lo mejor del ser humano que es la solidaridad y el amor por el prójimo” dijo la Hna. Glaudis Blanco.
Fuente: http://reportecatolicolaico.com/2018/01/las-hermanas-del-angel-de-la-guarda-no-se-detienen-por-la-crisis/