Por: María Saldivia Timaure
Nicolás Maduro considera que la merma de la producción petrolera en Venezuela se debe a la corrupción e ineficiencia de sus altos mandos. Así lo manifestó al canal de televisión TeleSur, el pasado sábado 24 de febrero.
“Ineficiencia, corrupción e incapacidad de jefes de la industria petrolera, desde su presidente para abajo, gerentes fundamentales (sic)… estaban metidos en una trama de corrupción, desorden, grupalismos económicos (sic) y conspiración… que llevaron a una reducción importante de 1 millón de barriles de petróleo. Ya la estamos recuperando. Afortunadamente, yo pienso que en el primer semestre de este año (2018), nosotros habremos recuperado el 70 % de la producción petrolera, que mermó gracias a estas causas que te estoy enumerando”, dijo Maduro al chileno Marco Enriquez-Omimami en esta entrevista.
¿Es esto realmente así? Casi 11 meses han transcurrido desde dicha entrevista y los números desmienten de forma categórica las aseveraciones del presidente venezolano.
Peor aún, organismos como la Asociación Internacional de Energía (AIE), ente ligado a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), prevén que se requerirán alrededor de 20 años para recuperar la producción petrolera venezolana.
La AIE va más allá, al punto que pronostica una disminución continuada hasta 2025, año en el cual -estiman- comenzaría la recuperación de la cuota de producción por parte de los venezolanos. Para 2040, la AIE considera que Venezuela sería el octavo país productor en el mundo, por detrás de Arabia Saudita, Irak, Irán, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Qatar y Nigeria.
Producción en declive
Lejos quedaron los días en que la producción petrolera venezolana superaba cómodamente los 3 millones de barriles diarios y en los que el país figuraba entre los primeros cinco productores del orbe.
De acuerdo con datos recopilados por British Petroleum (BP), desde 2006 -año en el cual Venezuela gozaba de una media de producción de aproximadamente 3 millones 340 mil barriles de petróleo diarios (bdpd)-, tal cifra ha ido mermando lenta, pero consistentemente, hasta llegar a los 2 millones 110 mil bdpd en 2017, según la misma BP.
Se intentó contrastar los datos de BP y la OPEP con los del Ministerio del Poder Popular de Petróleo (MINPET). Sin embargo, en este sitio web oficial, solo existen datos hasta 2014.
Pronósticos pesimistas
Tales guarismos han provocado la reacción de diversos especialistas dentro y fuera del país, como el economista y diputado por la Asamblea Nacional, José Guerra, que vaticinó en una entrevista realizada por el canal Globovisión en noviembre pasado que Venezuela dejará de ser exportador de petróleo.
Guerra aseguró que la situación es generada por la politización de Petróleos de Venezuela (PDVSA) y la renuncia de al menos 5.000 trabajadores capacitados de la empresa en los últimos años.
Por su parte, GlobalData –compañía líder de datos y análisis-, citada por la revista Forbes en junio pasado, sostiene que la producción petrolera venezolana caerá a alrededor de un millón de barriles por día para fines de 2018 –lo cual ya es un hecho-.
En el mismo artículo de Forbes, recuerdan que Venezuela ya había advertido a ocho clientes internacionales que no podría cumplir con sus compromisos de petróleo crudo en ese mes de junio.
La petrolera estatal venezolana PDVSA estaba obligada contractualmente a suministrar 1.495 millones de bdpd a esos clientes, pero solo contaba con 694.000 barriles por día disponibles para la exportación.
A lo que GlobalData añade que, de continuar con la marcada tendencia a la baja, entonces la interrupción temporal de las exportaciones de Venezuela podría ser permanente, ya que se acercaría a cero hacia el final de este año.
Más recientemente, también en noviembre, Forbes en español citó a Elias Matta, también diputado a la Asamblea Nacional, quien toma como referencia la cifra de 1 millón 171 mil barriles diarios, y argumenta que Venezuela tiene un consumo diario de 380 mil bdpd, a lo que debe sumarse el crudo destinado para el pago de deudas contraídas a Rusia y China. De esta manera, la cantidad disponible de bdpd para la exportación es de 400 mil, cifra que el legislador consideró como “ridícula”.
Esos 400 mil bdpd representarían un ingreso diario de aproximadamente 131.904.000 yuanes –tomando como referencia el precio del barril del petróleo venezolano en 329,76 yuanes, o 49,46 dólares-.
En dólares, ese monto se traduce en tan solo 19.785.600 por día. Es decir, ¡Casi 20 millones de dólares diarios es lo que estaría ingresando a las arcas del Estado venezolano por concepto de exportación petrolera en este instante!
Los planes del gobierno
A finales del pasado mes de agosto, el Ejecutivo Nacional anunció la firma de “14 acuerdos especiales de servicio conjunto” con una inversión pública y privada por el orden de los 430 millones de dólares.
“La incorporación de tecnología e inversión aportan la recuperación de producción y aumentarán a 641 mil barriles de petróleo diarios en 14 pozos, que totalizarán más de 1 millón 25 mil de barriles por jornada”, expresó en aquel momento Maduro desde el Palacio de Miraflores.
El presidente de PDVSA, Manuel Quevedo, brindaría más detalles sobre tales acuerdos. “Esta acción tendrá como resultado el desarrollo de 14 campos petroleros, con el equivalente de 384 mil barriles por día, con miras a elevar la producción de 641 mil barriles diarios a 1 millón 25 mil barriles, solamente en los 14 pozos priorizados”.
Meses antes, el mismo presidente Maduro reiteraba sus aspiraciones de impulsar la producción petrolera en 1 millón de bdpd para finales de 2018, y que buscaría ayuda de Rusia, China y la OPEP “de ser necesario”. Objetivo que Quevedo, quien también funge como ministro de Energía y Petróleo, calificó en su momento como “desafiante”.
¿Cuánto se requiere, en tiempo y dinero, para reactivar la industria petrolera?
El economista y experto petrolero, José Toro Hardy, considera que con una inversión anualde 25 mil millones de dólares, en un lapso de siete años el gobierno venezolano puede llevar la productividad de PDVSA a niveles de 1998. Sin embargo, advirtió que el Estado venezolano no tiene capacidad de inversión en estos instantes.
En consecuencia, se tendría que realizar una modificación a la Ley de Hidrocarburos para poder atraer a inversionistas en materia petrolera. “Esta reforma permitiría crear las condiciones, generar la flexibilización necesaria y tomar la vía necesaria para retomar la economía y devolver la esperanza a la gente”, expresó.
Luis Oliveros, economista y analista del tema petrolero, considera que recuperar los niveles históricos de la producción de crudo en Venezuela se llevará entre tres y cuatro años, si se adoptan las medidas gerenciales adecuadas y se hacen las inversiones con un estricto apego a la parte operativa, sin precisar la cuestión monetaria.
En cualquier caso, es mucho más del periodo que nos pretende vender el gobierno venezolano a través de sus múltiples intervenciones.
Propuestas para recuperar la producción petrolera venezolana
Una de las leyes que la actual Asamblea Nacional de Venezuela considera necesario reformar es, precisamente, la Ley de Hidrocarburos.
Así lo anunció el presidente de la Subcomisión encargada de realizar dicha reforma, el diputado Jorge Millán, el pasado mes de julio. Millán indicó que es necesario lograr un consenso en materia petrolera para apuntar hacia la recuperación y liderar el desarrollo nacional. No se tienen más noticias acerca de la evolución de tal reforma.
Sin embargo, esta no es la primera vez que se discute el tema de la recuperación de la industria petrolera en el país. A finales de 2016, un grupo de expertos se reunió en el IESA para evaluar un cúmulo de propuestas que permitirían mejorar la operatividad y, por ende, la producción petrolera.
Por su parte, de acuerdo con el ingeniero Eduardo Betancourt, que cuenta con 35 años de experiencia repartidos entre PDVSA y la empresa norteamericana Shell, “se necesitarían dos equipos: uno formado por expertos en los diversos procesos y que sea capaz de restablecer lo más pronto posible la capacidad de producción y refinación para suplir el mercado interno de empresas eléctricas, gasolina y gas, así como liberar el máximo de hidrocarburos para la exportación. El otro equipo deberá simultáneamente planificar y diseñar un nuevo modelo de industria capaz de sacar el mejor provecho posible para el país de su riqueza petrolera”.
Todas estas propuestas tienen un elemento en común: la recuperación de la principal industria del país pasa por la modificación a la Ley de Hidrocarburos.
En conclusión, esta realidad expresada en cifras y los expertos en materia petrolera desmienten a Nicolás Maduro y a su ministro de Petróleo, Manuel Quevedo. Por lo tanto, podemos catalogar esta afirmación del mandatario como una mentira.
Fuente: Cotejo.Info