La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) pidió hoy al órgano electoral de Bolivia que cumpla con la Constitución y haga respetar el resultado del referendo de 2016 que negó al presidente del país, Evo Morales, la posibilidad de volver a postular en las elecciones generales de 2019.
El secretario general adjunto de la CEB, José Fuertes, dijo a los medios en la ciudad central de Cochabamba que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) “debe actuar en un servicio total y pleno” a la Constitución y la ley el próximo 8 de diciembre, cuando se conocerá a los candidatos habilitados para las primarias de enero próximo.
“Ojalá no actúe de acuerdo a presiones de nadie, sino actúe en consciencia y en cumplimiento y servicio a la Constitución y a un referendo que ha habido en Bolivia. La postura de la Conferencia Episcopal es que hay que respetar ese referendo”, sostuvo.
Según Fuertes, esa consulta popular “se hizo para algo” y hay que respetar sus resultados.
En el referendo del 21 de febrero de 2016 fue rechazada mayoritariamente una reforma constitucional propuesta por el oficialismo para permitir que Morales vuelva a postular en 2019.
Pese a esos resultados, el oficialismo logró que en 2017 el Tribunal Constitucional avalara la reelección indefinida amparándose en que la Convención Americana de Derechos Humanos no puede privar de ese derecho a un mandatario.
El Constitucional ya habilitó a Morales para ser candidato en 2014 con el argumento de que su primer mandato, de 2006 a 2009, no cuenta porque el país fue refundado con la nueva Carta Magna promulgada en 2009 de República a un nuevo Estado Plurinacional.
Oficialistas y opositores están a la espera del anuncio que hará el órgano electoral el próximo 8 de diciembre sobre las candidaturas habilitadas para las primarias, en medio de advertencias de movilizaciones.
El gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) espera que el TSE termine de habilitar la candidatura de Morales amparado en la sentencia del Constitucional, mientras que la oposición demanda respeto por los resultados del referendo.
Por su parte, Jesús Juárez, arzobispo de Sucre, la capital constitucional de Bolivia, pidió al TSE “que se respete la Constitución y respetar la voluntad popular expresada en un referendo”.
El mandatario boliviano cuestionó en Twitter que un religioso haga “política y propaganda con mentiras” e insistió en que la consulta de 2016 “es símbolo de falsedad”.
Morales y sus seguidores aseguran que perdieron en el referendo por una supuesta campaña de desprestigio organizada por la oposición y han bautizado el 21 de febrero como el “día de la mentira”.
Fuertes replicó que los obispos “no tienen una postura partidista”, pero sí tienen opiniones políticas y hacen reflexiones “sobre lo que sucede en el país” porque es su obligación “orientar a su pueblo en todos los temas”. “Puede estar tranquilo el presidente porque los obispos no van a fundar un partido”, zanjó.
Ante los anuncios de movilizaciones, Fuertes hizo un llamado “a tener actitudes democráticas, de tolerancia, de respeto a todos, de respeto a las ideas diferentes” y “a que se depongan actitudes fanáticas, actitudes de intolerancia, porque si no, estamos amenazados”.
Fuente: cpalsocial.org