Francisco J Contreras M
Durante los últimos doce meses el precio del petróleo venezolano ha aumentado en 47 %, la distorsión cambiaria en el mercado negro se redujo de un promedio mensual de 75 % a un 12 % proyectado al mes de septiembre de 2018, el riesgo país promedio durante doce meses aumentó en 79 %, para este mes se anticipa una reducción del 4 %. Puede interpretarse que las variables resultado de entorno externo han mejorado para el régimen (precio del petróleo, riesgo soberano y distorsión cambiaria), salvo la insuficiencia estructural de reservas internacionales netas estimada en 75 %.
El problema más serio lo constituye en lo macroeconómico la emisión irresponsable de dinero que de un aumento mensual de 63 % durante los últimos 12 meses ha escalado hasta llegar a 106 % estimado al mes de septiembre, es el inductor clave del proceso hiperinflacionario venezolano.
En lo microeconómico los factores son variados: la asfixia regulatoria, el poder discrecional, las asimetrías de información y los incentivos perversos, que por un lado provocan una caída de la producción de bienes y servicios (1,2 % mensual según el FMI) y por otro impulsan una inflación de costos por baja absorción de costos y gastos fijos en los procesos de manufactura y por pérdidas de eficiencia impulsadas por “deseconomías” externas.
Entiéndase como “deseconomías externas” los costos y gastos adicionales que generan el deterioro de la infraestructura física del país, los malos servicios públicos, la baja de la productividad laboral y la inseguridad.
En tabla compartida en la nota siguiente se ofrecen los datos referidos formulados a partir de información del Banco Central de Venezuela, de J&P Morgan, del FMI y de la OPEP.