La Burriquita es Patrimonio Cultural de la Nación, y sus cultores recibieron este viernes un reconocimiento por su lucha por mantener esta expresión popular en contra del olvido.
Para ellos esta fiesta popular está vinculada a cuatro expresiones artísticas: el baile, la artesanía, el teatro y la música, así lo manifestó Marcos Montesinos, quien tiene más de 30 años como cultor popular.
“Es artesanía porque tú mismo realizas los trajes; es teatro porque actúas como una burriquita; se baila y es la música, porque sin ella no se puede ejecutar este arte”, refirió.
Este viernes, La Burriquita recibió el reconocimiento como Patrimonio Cultural de la Nación y para la ocasión se reunieron en la Plaza Bolívar de Caracas cultores populares y agrupaciones de varias regiones del país, quienes realizaron un recorrido hasta El Foro Libertador donde se realizó el acto formal.
Durante el desarrollo de la actividad Montesinos resaltó que sigue realizando esta actividad con gran pasión y entusiasmo como si fuese su primera vez; y lucha por su permanencia en el tiempo.
“Hoy estamos aquí para defender esta tradición, para que perdure en el tiempo y en nuestras futuras generaciones, quienes serán los herederos de esta bella expresión de Burriquitas”.
La Burriquita es una exposición cultural venezolana que inició durante la época de la colonia y se lleva a cabo en fiestas de carnaval, decembrinas o celebraciones patronales en algunas regiones del país.
Por su parte, Elpidio Baullón, quien ha formado parte de esta tradición por 48 años, destacó la importancia que tiene esta expresión artística para todos los venezolanos, en la que se refleja el trabajo y la identidad del pueblo.
En esta actividad, el Instituto de Patrimonio Cultural entregó un reconocimiento por su labor a 57 cultores y cultoras provenientes de 14 estados del país; así como 8 reconocimientos Post Morten que se entregaron a familiares.
Este viernes fue difundida en gaceta oficial la declaración oficial de Las Burras y Burriquitas como Patrimonio Cultural de la Nación.
Fuente: http://www.aporrea.org/cultura/n299034.html