ACNUR
Aunque en muchos países se regula la igualdad entre hombre y mujer, y se prohíbe la desigualdad por razón del sexo, la situación real en materia laboral se aleja de la igualdad de género en el trabajo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) tiene entre sus líneas de trabajo la igualdad de género y como objetivo establecer determinadas bases como:
Promover el cumplimiento de los principios y derechos básicos en el trabajo.
Generar oportunidades para que exista una igualdad de género en el trabajo que sea real.
Fortalecer el diálogo social.
Mejorar la seguridad laboral.
La “brecha de género sigue existiendo”
En la actualidad, la desigualdad de género, a pesar de los avances de los últimos años, se manifiesta en muchos ámbitos de la vida y el trabajo es uno de ellos. El último informe del Foro Económico Mundial sobre la Brecha de Género aporta datos tan significativos como los siguientes:
Al ritmo actual, se tardaría un siglo en alcanzar la igualdad de género.
La brecha de género se sitúa en un 68%, y los países nórdicos (Islandia, Noruega y Finlandia) siguen destacando por su mayor igualdad. Les siguen Ruanda y Nicaragua, que destacan por la presencia de la mujer en política.
Los países con mayor desigualdad son Yemen, Paquistán, Siria y Chad.
Estados Unidos retrocede 4 puntos respecto al año anterior.
España sube puestos (del 29 al 24), pero sigue mereciendo un suspenso en materia de igualdad.
Un aspecto importante que destaca en el informe es que la paridad económica de género podría aumentar en 250 millones de dólares adicionales el PIB del Reino Unido, por ejemplo.
¿En qué se manifiesta la desigualdad de género?
En el ámbito laboral, según el “Informe de Eurostat sobre Igualdad de Género”, la situación sigue alejada de la igualdad; de hecho:
Las mujeres cobran alrededor de un 16,3% menos que los hombres por desarrollar un mismo trabajo.
Las mujeres en la Unión Europea son más propensas a trabajar a tiempo parcial: el 32% de las mujeres trabajadoras lo hace a tiempo parcial frente al 9% de los hombres.
La tasa de desempleo es más alta para las mujeres, sobre todo en Grecia y en España, frente a las bajas tasas de Irlanda, Letonia y Lituania.
Las pensiones de las mujeres son también inferiores debido a años de desigualdad laboral.
En el ámbito empresarial solo el 6,5% de los cargos directivos de las empresas que cotizan en bolsa son mujeres.
Lo que opinan los europeos
Por otra parte, en noviembre de 2017 se publicaron los datos del Eurobarómetro, que ponen de manifiesto la opinión que tienen los europeos sobre la desigualdad entre hombres y mujeres en el ámbito del trabajo. Los datos más significativos de la encuesta son los siguientes:
La mitad de los europeos encuestados opina que debería haber más mujeres en los puestos de responsabilidad de toma de decisiones políticas.
7 de cada 10 están a favor de tomar medidas legales para garantizar la igualdad entre hombres y mujeres en la política.
8 de cada 10 europeos opinan que los hombres deberían asumir más responsabilidades domésticas.
Sin embargo, la desigualdad sigue existiendo y se manifiesta de muchas formas, por lo que todavía queda un largo camino por recorrer para que la igualdad de género en el trabajo y fuera de este sea una realidad.
Fuente: http://ow.ly/mvmp30idspo