IHU – Unisinos
Adital
Después del terremoto sufrido en Haití, en enero de 2010, comenzó una intensa migración de haitianos a Brasil, principalmente en la ciudad de Manaos. Según el sacerdote jesuita Paulo Tadeu Barausse, quien participa en el proyecto Pro-Haití, en los últimos tres años pasaron por Manaus alrededor de 5 mil haitianos. “No es fácil mantener viva la esperanza, ya que muchos llevan en si mismos, traumas y heridas”, relata en la entrevista concedida por correo electrónico al IHU on-line. Barausse explica que el Gobierno Federal ha otorgado visas a los migrantes, lo que ha permitido la llegada de aproximadamente 120 haitianos al mes, sin embargo, continúa, “los gobiernos estaduales son bastante pasivos, por parte de ellos, casi no hay ninguna toma de posición. No hay un trabajo sistemático que incorpore los niveles Federal, Estatal y Municipal”. Señala que algunos de los inmigrantes haitianos que hablan portugués comparten sus preocupaciones y angustias por la situación actual en el país. “Manifiestan un cierto pesimismo sobre la reconstrucción de Haití. Hablan mucho de sus familias. Siempre están preocupados por enviar remesas para ayudarles. Otros son más reservados para hablar sobre la realidad de su país. Sus conversaciones giran en torno al trabajo y la búsqueda del mismo”.
Dolorosas y sufridas historias de la migración. La vida de los haitianos en Brasil. Entrevista con Paulo Tadeu Barausse