Como parte de esta nueva etapa para nuestra Revista SIC, los miembros del Consejo Editorial, Consejo Redacción y demás colaboradores se animaron a compartir sus impresiones sobre la importancia de SIC hoy y sus aportes concretos desde las distintas áreas del saber que representan. En esta oportunidad, te presentamos a Germán Briceño Colmenares, quien es abogado y escritor, y se desempeña como miembro de nuestro Consejo de Redacción.
–¿Por qué es importante la presencia de una revista como SIC en la actualidad?
–En todo tiempo, pero especialmente en situaciones de crisis, hacen falta referentes que apunten a rescatar los valores perdurables e intenten marcar un rumbo, en lo personal y lo colectivo, sobre la base de lo importante, lo trascendente, lo permanente.
En este sentido, SIC resulta un instrumento especialmente valioso, al menos desde una doble perspectiva. Por un lado, en un país mayoritariamente cristiano, una revista de inspiración católica –aunque abierta a todas las opiniones sensatas y razonadas– puede contribuir en gran medida a iluminar las realidades cotidianas con la luz de la fe.
Por otra parte, ante el grave deterioro institucional que atravesamos, una publicación con ochenta años de existencia ininterrumpida a sus espaldas reivindica la importancia de los proyectos a largo plazo, de las instituciones que parmenecen, a pesar de las circunstancias, renovándose sin perder su esencia.
–¿Cuál es tu valor agregado en el equipo SIC?
– Esta nueva etapa de SIC, en la que por primera vez se designa a un laico para dirigirla, marca claramente una apertura hacia nuevas voces y una renovación hacia nuevos ámbitos sin perder nunca sus principios, su norte y su razón de ser.
Tengo el inmenso privilegio de ser una de estas nuevas voces invitadas a participar en la revista. Mi responsabilidad, entonces, sería intentar reflejar esa amplitud de miras a través de mis contribuciones, con un énfasis en historias que resulten estimulantes y edificantes y que, en lo posible, nos digan algo a los hombres de estos tiempos y estas circunstancias.
–¿Qué significa para ti formar parte de la revista SIC?
– Por una parte, un gran honor al poder compartir este espacio con un grupo de personalidades tan destacadas en sus respectivos campos. Por otra parte, al volver la vista atrás y contemplar la brillante trayectoria de SIC y también al vislumbrar el porvenir, una enorme responsabilidad y un compromiso hacia los lectores que nos honran con su tiempo.
