Rafael Curvelo
En los últimos días hemos sido testigos una vez más de cómo la calle se ha convertido en la tribuna para que los Estudiantes de toda Venezuela expongan su descontento ante la realidad que vivimos; escasez, inflación, desempleo e inseguridad, por nombrar algunos calvarios que día a día padecemos, no importa nuestra ideología o religión, todos sufrimos los mismos problemas.
No podemos ser indiferentes a las protestas que se viven, ya que se recrudecen con el pasar de los días, se multiplican por todos el País y vemos a un Gobierno que no reconoce esta realidad, más bien la esquiva, busca algún chivo expiatorio, llegando por enésima vez a acusar a un Gobierno Extranjero de toda la crisis. Por otro lado vemos a una oposición que busca su espacio dentro del conflicto, sin conseguirlo, ya que vemos a un Estudiantado, que en conjunto a la Sociedad Civil ha sobrepasado un Liderazgo carente de ideas y muchas veces tardío para reaccionar ante la realidad.
Los Estudiantes, ejemplo histórico de luchas, han sabido ver mejor que nadie un panorama, luchar por un futuro que no les lleve a la camisa de fuerza ideológica que pretende imponer un Gobierno, que con el pasar del tiempo se desgasta y no sabe como reaccionar ante lo que muchos Ministros y Dirigentes Gubernamentales fueron en sus años de Juventud. Generaciones como las del 28, 58 o más reciente las del 2007 usaron como tribuna la calle para llevar un mensaje de descontento a un Pueblo, que en muchas ocasiones vio en los Estudiantes la catapulta para lograr los cambios que en esos momentos se requería.
Para que las acciones que vemos den frutos en un plazo muy corto, es necesario no solo contar con los Estudiantes, se hace necesario incluir a diferentes factores de la Sociedad como Gremios, Sindicatos y sobre todo aglutinar el descontento que existe en muchos Sectores Populares que como siempre son los más golpeados de las acciones de un Gobierno que cada día a día pierde la credibilidad y es incapaz de solventar los más básicos problemas que existen en Venezuela.
