El significado de esta acción es entendido como un mensaje que se utiliza en momentos de crisis, muchas veces para protestar, aunque no es un rompimiento
Josué Bravo
El gobierno costarricense llamó a consultas a su representante diplomático de mayor rango en Venezuela, la ministra consejera y encargada de negocios, Ana Patricia Villalobos Arrieta, para analizar la situación política en el país sudamericano.
Según la cancillería costarricense, el llamado a consultas de su ministra consejera es “para que contribuya a la reflexión emprendida por el Gobierno de Costa Rica sobre lo que acontece en ese país”, aunque en realidad el significado de esta acción es entendida como un mensaje que se utiliza en momentos de crisis, muchas veces para protestar, aunque ello no signifique el rompimiento de las relaciones diplomáticas.
El llamado a consulta usualmente se realiza cuando no hay comunicación entre los presidentes de ambas naciones. También es un canal para manifestar al otro país lo que en términos diplomáticos se conoce como preocupación.
Precisamente al informar sobre el llamado a consultas de su funcionaria, Costa Rica expresó su “más profunda preocupación por la convocatoria del Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela a una Asamblea Nacional Constituyente, cuyos asambleístas, en lugar de ser electos por medio del sufragio directo, secreto y universal, serán seleccionados por sectores sociales y comunidades”.
Y subrayó que “lejos de atender a los legítimos llamados de millones de venezolanos y de la comunidad internacional, por asegurar la plena restauración del orden democrático en Venezuela, el anuncio del 1 de mayo de 2017 cercena la ya frágil institucionalidad democrática y del Estado de Derecho en ese país, y aumenta aún más los niveles de tensión social que ha provocado la suma de decenas de personas heridas, torturadas, detenidas o bien, que han perdido su vida”.
Así mismo, el documento instó al Gobierno de Nicolás Maduro a cumplir con todas sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos, a excluir la participación de militares y fuerzas armadas de los operativos sobre el manejo de manifestaciones públicas y el uso de armas de fuego. “Las armas son disparadores de violencia y Costa Rica deplora la militarización del conflicto, así como el anuncio de armar a 500.000 milicias civiles”, insistió.
Costa Rica reitera el llamado al Gobierno de Maduro para que, por medio la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), levante el desacato a la Asamblea Nacional, garantizando así la debida separación e independencia de los poderes, la vigencia del Estado de Derecho y el disfrute de todos los derechos y libertades fundamentales de los venezolanos.
“Costa Rica continuará abogando por la concreción de un ‘acuerdo nacional’ tácito con una hoja de ruta verificable. Esa hoja de ruta debe empezar por atender las profundas crisis que enfrenta Venezuela, como el establecimiento de un canal humanitario, y definir fechas para el cumplimiento del cronograma electoral con observación internacional reconocida, la liberación de los presos políticos y el levantamiento de la inhabilitación para ejercer cargos públicos de los opositores al Gobierno”, puntualizó.
Fuente:
http://www.diariolasamericas.com/america-latina/costa-rica-retira-representante-diplomatico-venezuela-n4121339