Por Arelys Goncalves | Express News
En los meses recientes, la realidad venezolana ha retumbado en varias partes del mundo. La prensa británica también ha registrado las últimas acciones de la oposición y el oficialismo y han plasmado en reportes especiales la crisis humanitaria que enfrentan quienes no pueden escapar del colapso económico y político del país.
Los venezolanos desde la diáspora también han dado su aporte para crear conciencia sobre el país que en una época fue uno de los más prósperos de la región. En 2019 la capital británica ha recibido además a dos cineastas que con sus producciones audiovisuales buscan difundir a una escala mundial la crudeza y la tragedia a la que se enfrentan los ciudadanos en un país en el que se comenten frecuentes violaciones a los derechos humanos, según organizaciones internacionales.
Uno de los primeros en visitar el Reino Unido fue el cineasta y escritor Diego Vicentini con su cortometraje “Simón”, del 2018. El segundo fue el documentalista y director cinematográfico Tuki Jencquel que acompañó la proyección de su trabajo titulado “Está Todo Bien”, dedicado al sector salud. A sala llena, ambos cineastas compartieron con la audiencia sobre estos dos enfoques de una misma tragedia, la actualidad venezolana.
“Simón”
Se trata del cortometraje que realizó Vicentini como trabajo de grado para su Maestría de cine en Los Ángeles, California y que estuvo inspirado en las protestas del 2017 que se desataron luego de que el Tribunal Supremo de Justicia se atribuyera las funciones de la Asamblea Nacional. Tras varios meses de protestas antigubernamentales y represión por parte de las autoridades, las cifras fueron impactantes, 158 fallecidos, gran parte de ellos jóvenes estudiantes asesinados por armas de fuego.
La impotencia de Vicentini ante tanto sufrimiento y la feroz represión lo llevó a escribir este documental como una manera de alzar su voz para denunciar lo que estaba ocurriendo. El espíritu decidido de los estudiantes de salir a las calles para reclamar la libertad y el respeto a democracia fue la mayor inspiración para este joven cineasta de 24 años de edad que tituló su corto con el nombre de El Libertador.
Tal como dijo a Express News, este filme es para quienes están en la calle, que no se rinden, que defienden la libertad, “ellos son los verdaderos héroes”.
El cortometraje de 36 minutos toca también la difícil experiencia del asilo, la discriminación y la incomprensión de quienes no entienden la situación que se vive en el país. El propósito de Diego Vicentini se cumplió y su trabajo se ha convertido en una de las referencias fílmicas recientes sobre las protestas en Venezuela. La cinta se ha visto en varios festivales en Estados Unidos y en Europa.
En Londres se presentó el pasado 11 de marzo en un evento realizado a beneficio de la organización de caridad Chamos, que ayuda a los niños en Venezuela. En esta ocasión, el director conversó con el público sobre lo que ha significado este trabajo que ya ha pasado además por varias partes del Latinoamérica. Simón continúa con su gira internacional que realiza además con la finalidad de reunir fondos para instituciones de caridad que ayudan a aliviar la problemática en el país suramericano.
Está Todo Bien, 2018
Es el original trabajo documental de Tuki Jencquel, quien, de una manera muy delicada y creativa, muestra el peor rostro del colapso del sistema de salud venezolano. El cineasta presenta en 70 minutos de filme a una farmaceuta que se ve obligada a cerrar su farmacia por falta de medicinas, un cirujano que sabe lo que se vive en los hospitales entre la violencia por la represión y la falta de insumos médicos, un activista social que ve cada vez más difícil la entrada de medicinas al país y dos pacientes con cáncer que deben hacer lo imposible para encontrar las medicinas y recibir la atención necesaria.
A través de esta producción venezolanoalemana, los participantes reflexionan sobre lo que ocurre y sobre las opciones puestas sobre la mesa: aceptar, luchar en la calle, emigrar o quedarse aunque la situación empeore. Cada uno de los protagonistas cuentan sus propias realidades como una perspectiva de la crisis en hospitales y, en general, en la salud. Mildred Varela y Rebeca Dos Santos, son las más afectadas por no tener posibilidades de recibir la atención médica ni el tratamiento adecuado para el cáncer.
Luego de Londres, el cineasta ha llevado su trabajo a otras latitudes y el documental se ha convertido en otra ventana para mostrar al mundo lo que ocurre, principalmente para ayudar a entender el desabastecimiento.
El pasado 20 de marzo se proyectó en Londres en el cine de Barbican y en el Regent Street Cinema, durante Human Rights Watch Film Festival. Jencquel estuvo presente para responder a las incógnitas del público. Una de ellas fue sobre el destino de quienes participaron. En su intervención comentó lo que había ocurrido con ellos, especialmente con la joven Rebeca que había salido del país a recibir tratamiento, aunque su condición era delicada en vista de que la ayuda había tardado mucho en llegar.
Pocas semanas después, Express News conoció sobre la lamentable noticia. Para tristeza de todo el elenco y del país entero, Rebeca, conocida en las redes sociales como Beca Dicaro, falleció en Italia el 10 de abril debido a su enfermedad. Durante la grabación y, a través de sus videos en internet, siempre demostró fortaleza y su decisión de aferrarse a la vida.
Su voz logró ganarse el corazón de muchos que la recordarán como un ejemplo de perseverancia de esa Venezuela que no se rinde, que no sucumbe, que no quiere perder la esperanza, como lo muestran estas dos producciones.
Fuente: http://www.expressnews.uk.com/texto-diario/mostrar/1410177/cineastas-venezolanos-llevan-crisis-pais-gran-pantalla