Peter, Seewald, Ed. Mensajero, 2020.
Una biografía del Papa más culto del siglo XX.
Por Jesús María Aguirre
Acaba de aparecer la biografía Benedicto XVI de Peter Seewald. Más allá del interés teológico y eclesial o de las disputas ideológicas, me interesan sus consideraciones y referencias a la cultura alemana, desde Goethe a Theodor Storm, que formó la base de la educación de Joseph Ratzinger durante aquellos años y que nos permite comprender, por ejemplo, sus catequesis sobre la importancia de la cultura. Nada de extrañar en un alemán su conocimiento de Goethe, pero más especial resultan el poeta Thedor Storm, un danés absorbido por Alemania y sobre todo Hermann Hesse, premio Nobel de literatura en 1946. Descubrimos, pongamos por caso, que una de sus lecturas favoritas era Peter Camenzind, de Hermann Hesse de 1904, así como El lobo estepario, del mismo autor. Conozco esta última, que tiene incluso una adaptación cinematográfica, pero no la anterior.
A veces me pregunto ¿por qué pudiera interesarle?, y no me sorprende, cuando leo que Hesse ingresó en 1891 en el seminario evangélico de Maulbronn, del que se escapó en marzo de 1892 a causa de la rigidez educativa que le impedía, entre otras cosas, estudiar poesía: «seré poeta o nada», dice en su autobiografía.
Peter Camenzind publicada en 1904, fue la primera novela escrita por Hermann Hesse; en ella ya se pueden entrever una serie de temas que iban a ser motivo de preocupación en muchos de los trabajos posteriores de Hesse, sobre todo el de la búsqueda de una identidad física y espiritual única en un contexto que tiene como telón de fondo la naturaleza y la civilización moderna. También está presente la reflexión sobre el papel del arte en la formación de una identidad personal. Digamos que es una novela del proceso formativo, un relato del proceso de aprendizaje de la niñez a la edad adulta de un exseminarista.
Ratzinger, como se ve, es un hombre de refinada cultura alemana, que enriqueció su visión del mundo con la crema de la alta cultura europea, no solo literaria sino musical, dadas incluso sus destrezas pianísticas. Razones que explican el respeto de los pensadores europeos por él.