Jesús Plaza y Luis Sánchez, dos hombres consagrados al seguimiento de Cristo, acogedores, dedicados toda su vida a la formación y acompañamiento de jóvenes con el ideal y la misión de sembrar valores en las personas, con el sueño de transformar nuestro país con la luz del evangelio, para reducir la violencia y garantizar una convivencia pacífica, consiguen la muerte a manos de jóvenes inconscientes del valor supremo de la vida.
La Comisión de Justicia y Paz está profundamente consternada por el asesinato del Padre salesiano Jesús Plaza y del hermano salesiano Luis Sánchez. Ante este suceso incalificable y doloroso que enlutece a la Iglesia venezolana y, particularmente a la familia salesiana, queremos expresar nuestra indignación por lo que este irreverente hecho entraña e indica de erosión de los valores y deterioro de nuestra convivencia social.
Nuestra condolencia a los familiares del padre Jesús Plaza y del hermano Luis Sánchez, a nuestros hermanos Salesianos y a toda la comunidad católica en Venezuela por esta irremediable pérdida.
Repudiamos todo acto de violencia ejercida sobre cualquier persona y exigimos a las autoridades competentes clarificar los hechos para seguir en el camino de la justicia social y la paz de la que estamos careciendo en los últimos años. Pedimos igualmente, Se garanticen los DD.HH y el debido proceso de los victimarios.
Elevamos nuestra oración para que en nuestro país recuperemos en nuestra convivencia el respeto por la vida y, seamos conscientes que la persona humana es templo de Dios, y la vida es sagrada.
En Caracas, a los 17 días del mes de Febrero del 2014
+ Mons. Roberto Luckert León | + Mons. Baltazar Porras
Presidente | Presidente
Oficina de Justicia y Paz | Comisión de Pastoral Social