Extracto El Universal
El embajador del papa Francisco en Venezuela, monseñor Aldo Giordano, en su primer discurso a la Conferencia Episcopal Venezolana, se refirió al congelado diálogo y en particular mostró preocupación porque el perdón no figure en el discurso de ninguno de los actores políticos y sociales.
“Me parece que, de manera particular, el tema del perdón está ausente en el debate”, afirmó luego de citar extractos del mensaje que el Pontífice dirigió al Gobierno y la oposición, con motivo del inicio de las conversaciones en abril pasado y donde les dijo que el “heroísmo del perdón y de la misericordia (…) nos rescatan del resentimiento, del odio y abren un camino realmente nuevo”.
Giordano, quien dijo que su experiencia como diplomático en Europa le ha entrenado para negociaciones difíciles, informó a los prelados los cuatro principios que le han guiado durante su participación en el diálogo venezolano:
- El tiempo es superior al espacio, este principio permite trabajar a largo plazo, sin obsesionarse por resultados inmediatos.
- La unidad prevalece sobre el conflicto, el conflicto no puede ser ignorado o disimulado (…) pero si quedamos atrapados por él perdemos perspectivas.
- La realidad es más importante que la idea (…) es peligroso vivir en el reino de la sola palabra.
- El todo es superior a las partes (…) no hay que obsesionarse demasiado por cuestiones limitadas y particulares”.
Y, por último, pidió tanto al Gobierno como a sus adversarios aunque sin mencionarlos, abrir el horizonte, pues así “la mirada no se encandila totalmente por el problema y (se) puede ver todavía los rostros de las otras personas alrededor de nosotros, que pueden concurrir a resolver el problema”.