“Somos aquí mendigos de la misericordia del Padre”. Con este espíritu, enfatizado por el Papa Francisco en su reflexión en la que llamó a sanar las heridas de la Iglesia. El Pontífice emitió estas palabras el martes 1 de octubre por la tarde. Se trata de la vigilia penitencial en la Basílica de San Pedro a pocas horas de la apertura de la segunda sesión de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos.
Testimonios de sufrientes
Tras escuchar los testimonios de un sobreviviente de abusos sexuales, de una voluntaria comprometida en la acogida de migrantes y de una religiosa originaria de Siria, narrando el drama de la guerra, Francisco aseguró: “La Iglesia es siempre la Iglesia de los pobres de espíritu y de los pecadores que buscan el perdón, y no sólo de los justos y de los santos, es más, de los justos y de los santos que se reconocen pobres y pecadores”.